jueves, agosto 17, 2006

Las grandes decisiones

El mundo vive una época de turbulencia. Las comunidades se sacuden frente a la aceleración del cambio. La economía, la práctica de la política, las religiones, y hasta la prostitución, están cambiando el rumbo del comportamiento humano que hoy ya es diferente desde la segunda mitad del siglo pasado. La extrapolación, proceso de percepción que considera que la vida seguirá en desarrollo normal, viene a ser una ficción. La discontinuidad es una característica de la época.Si las grandes decisiones de las autoridades del Gobierno y de las instituciones que son el timón del crecimiento y desarrollo no se las toma con sabiduría, se genera el caldo de cultivo para el desastre y el fracaso.Es lo que está pasando, según las diarias noticias de los medios, con la decisión del gobierno de Palacio respecto al bloque 15. Al parecer hubo conocimiento superficial acerca del escenario, la estrategia y el negocio (el contexto general) cuando se tomó la decisión de declarar caducado el contrato con la Oxy.Factores técnicos aparte, no es posible entender menos comprender, las causas y razones repentinas que llevaron a la decisión violenta de cancelar un contrato de valor geoeconómico para el país, en época de déficit en el presupuesto nacional.Las grandes decisiones que se toman y las políticas que se emiten en las altas cúpulas y que son potestad de ellas, causan efectos futuros; así se dirijan al área operativa.¿Cuánto le costará al Ecuador haber declarado caducado el contrato con Oxy, el lucro cesante y el riesgo que se está corriendo con los barriles de crudo extraídos y almacenados? ¿Cuál es el beneficio que hasta ahora ha ganado el país, con la que se considera una sabia y patriótica decisión?El manejo del petróleo ecuatoriano hasta ahora no ha servido para el desarrollo sostenido, planificado y metódico del país. Al parecer abundan los contratos, la tercerización y otras actividades que demanda la explotación de un producto mundialmente estratégico, de valor político y económico, de los que saldrán perjudicados y/o beneficiados con la decisión. En términos generales, no se ha hecho conocer el efecto incremental al dueño del recurso, si es que lo ha habido, en el ingreso per cápita.Y aunque no pertenece al tema, pero sí es cercano, sería una patriótica decisión exigir a Petroecuador que publique sus estados financieros consolidados auditados, por auditores independientes, la carta a la gerencia sobre control interno y el flujo de efectivo. Entonces podríamos saber muchas cosas más acerca de lo que existe tras la piel gruesa y dura de este paquidermo. De seguro que conocer otros factores será de visible interés para los accionistas de la entidad, que somos todos los ecuatorianos.Quise tratar un tema que les corresponde a las más altas jerarquías en la empresa, como son las decisiones y las políticas estratégicas. Lamentablemente me traicionó mi subconsciente y me llevó a dos temas diferentes pero interrelacionados; este último que ya va muriendo, como cantó con tristeza el poeta: igual que muere en el alma una ilusión. Disculpen lectores, pero también es moda el 2x1.

jueves, agosto 10, 2006

TLC y nueva estrategia

Resulta cómodo mantenerse dentro del estatus; las cosas no cambian, la resignación sigue generando frutos. La ausencia de valor para tomar decisiones trascendentales empequeñece el futuro del país envuelto en la cultura del petróleo.¿Qué grandes intereses particulares se esconden entre la realidad y la sombra de lo que es la nueva estrategia de desarrollo -también se podría llamar control- del comercio exterior?La política exterior de Estados Unidos tiene ahora dos fases: una es la fase de su poderío militar, y la otra es la conformación de un mundo más interconectado por medio de tratados comerciales que le asegure los mercados para su industria, y su consumo.El TLC es una nueva arma de dominio universal. Un país puede dejar de guerrear, pero no puede parar su comercio: es la ley, y en afán de romper la situación, los países que ya lo han entendido así, han comenzado a protegerse con tratados similares entre los que necesitan intercambio de productos. El principio de libertad aplicado al comercio.Es decir, está surgiendo otro tipo de integración, que siendo comercial podría estar abriendo otras formas de intercambio que lograrían mejorar la creación de riqueza de los países que la practiquen. Ergo: el total sería mayor que la suma de las partes.Por lo comentado y por otros factores de importancia, y dada las escasísimas explicaciones oficiales, no se pueden comprender las razones básicas, fundamentales, técnicas, económicas y políticas que han primado para la decisión oficial de suspender las negociaciones con Estados Unidos. Como bien lo dice Condorito: ¡exigimos una explicación!En el nuevo estilo de gobernar, todo es secreto de Estado. Los ciudadanos tenemos la obligación de votar, y de ahí en adelante. aunque resulte gato por liebre, es tal.Nos guste o no, con la voluntad nuestra o sin ella, el TLC va. No es buena política de las empresas adoptar la del avestruz. Hay que determinar el nuevo perfil empresarial para la nueva época competitiva que abrirá por los tratados que se firmarán, en que las empresas tendrán valores agregados para estimular su particular creación de riqueza, y entre todo, la competencia de China, India y otros más, que formarán la próxima y nueva cultura del comercio internacional.(Se recomienda hacer una auditoría de supervivencia para que las empresas puedan determinar cómo hacer frente al paradigma del comercio internacional que está surgiendo).Hay capital suficiente en el mundo y hay formas de generarlo. Lo que está ocurriendo es que el empresario es reacio a una visión diferente. La corriente de cambio no seguirá el mismo cauce que hasta ahora. Ante el empuje de las fuerzas actuales, los gerentes deben estar vigilantes para analizar tendencias y valores agregados. El peligro está en creer en la actitud indiferente.Las noticias acerca de las reuniones del TLC son las que generalmente provinieron del sector oficial. Lo que se impone es el realismo de un análisis sistemático y disciplinado que lleve a los empresarios a tomar decisiones inteligentes para el futuro de sus empresas y sus inversiones.

jueves, agosto 03, 2006

Guayaquil competitiva

No se trata de proclamas electorales, ni de promesas que las multitudes pronto olvidan, ni de retórica o de ditirambos inscritos en el diccionario de los desdibujados actores en el escenario político ecuatoriano.Se trata de resaltar los efectos y consecuencias positivas en el desarrollo de la ciudad, que realiza un administrador con un equipo de concejales de igual empuje. Guayaquil ya no es reto del pasado oscurantista, y forma filas en el futuro que ya sucedió. Atenazada siempre por el celo regionalista, su progreso ha venido amarrado al cuentagotas a tres mil metros de altura. Toda una urdimbre tratando de parar el metabolismo de un conglomerado social de una metrópoli que crecía y crecía vegetativamente por entre el río y el pantano.En recientes años, salvo honrosas excepciones, la administración municipal se la utilizó como organismo depredador de su economía, o como bastión para la lucha política. Su condición de ciudad más poblada atraía gente de todo matiz, sin raíces. La población se volvió amorfa, heterogénea, impía e irreverente.Ha llegado la transformación. La ciudad por décadas estrujada se levanta cual gigante dormido, que desperezándose le grita al mundo: ¡Aquí estoy con mi nuevo escudo para ser competitiva…!Desde el punto de vista técnico, la administración municipal marcó sus objetivos. No se ha tratado de hacer cosas al sol que nace. Se ha tratado de “administrar” una institución: los ingresos (impuestos, tasas, etcétera) que pagan los ciudadanos, revertirlos en beneficio de la ciudad, y crear obra pública redituable, que asegure la supervivencia, siguiendo la mística del desarrollo universal.Un municipio no es institución de negocio, sino de servicio y resultados para la comunidad. Todo servicio debe redituar porque demanda permanencia, reciclaje y mejorar; si estos no se cumplen, la entropía dará buena cuenta de ellos. En esta parte radica la fundamental diferencia en el manejo financiero de los recursos efectivos.El actual administrador de la ciudad conoció –así se lo percibe– las obras públicas estratégicas necesarias para el despegue hacia el desarrollo, crecimiento y progreso, y dedicó con su grupo, tiempo y esfuerzo a crear recursos y romper tabúes para la obra. ¡Levántate y anda!Como resultado se tiene una ciudad con diferente perfil. (Por ahí alguien después de haber leído doscientos libros de economía ha calificado a la ciudad como la capital del delito). ¡Vaya una relación!Ahora ya amaneció para Guayaquil una nueva perspectiva. Ya no importan las críticas depredadoras. Las obras materiales que estimularán la inversión y el progreso, mas lo que está por venir… hacen de Guayaquil una ciudad competitiva, sin intención de aplastar ni empequeñecer a otras ciudades del país, sino para servir como mecanismo de encendido y disparador para el arranque y desarrollo acelerado de otras. Se ha despejado, además, en forma contundente, que la energía perseverante al servicio del propósito u objetivo, logra vencer los obstáculos de intereses particulares, el genético negativismo burocrático, y hasta la perfidia legalista.El alcalde Nebot tiene, con el nuevo perfil, un nuevo desafío cual es el de crear la confianza en la ciudad como centro de inversión y trabajo. Además, como en la organización privada, ir asegurando la sucesión para que se perpetúe la filosofía administrativa en bien de la comunidad.Soñemos en Guayaquil como ciudad competitiva dentro de diez años próximos.