Capacidad de respuesta

La cultura del conocimiento que genera la revolución informática trae consigo una nueva apreciación del recurso tiempo. La administración de las empresas de toda categoría tiene que desaprender la antigua fórmula de la utilización del tiempo, para aprender la técnica de decidir y trabajar en tiempo real.Esta realidad conlleva a desarrollar en el ejecutivo un nuevo arte de pensar en que el tiempo real para las decisiones y el sentido del riesgo, cambian el panorama de la producción, sus costos y su distribución.Ante el cambio del entorno externo, los modelos empresariales tienen, mejor expresado, deben cambiar luego de un análisis a profundidad del hoy y del futuro. (Para lo cual se lucha contra una realidad: los administradores que se sienten bien pagados y protegidos, negarán esta necesidad y seguirán programando sobre el mismo terreno). Es difícil despedirse del pasado.Cada empresa es un modelo diferente, sus jerarquías, su organización, su estructura productiva, la composición de su personal, de sus productos y sus mercados; todo y su relación externa es diferente a otra, por similar que sea el producto. Por lo tanto, copiar un modelo no es garantía de éxito, y más vale podría resultar en desperdicio de recursos.La eficiencia, que es la sabiduría para hacer lo que se debe hacer no solamente lo que se tiene que hacer, es donde radica el secreto de la buena dirección. Esta es la razón por la que se paga a los gerentes: para ser eficaces, para dar resultados en el presente y preparar la cosecha del futuro.El entorno externo tiene material para todo el mundo. Hay lo bueno y lo malo; oportunidades, errores y beneficios. Todo lo cual el gerente con visión puede ponerlo en beneficio de lo que es de su responsabilidad. Y la responsabilidad no se la puede dividir, como Taylor lo hizo con el trabajo. Un gerente no puede preguntar “por qué no estamos en las páginas amarillas”, como se expresa en una simpática publicidad.Una empresa de negocios es un núcleo para dar resultados para quienes invierten sus capitales en ella; por lo tanto, tiene que aportar beneficios mensurables. (Habrá que establecer los parámetros estratégicos de medición).El mundo de los negocios y el empresarial cada vez está más interconectado en redes. La computadora induce que se dependa más de internet. Es deber del empresario, administrador o gerente, aprender a pensar en futuro.Cuando se trata de seleccionar a un ejecutivo de gerencia superior, si se evalúa lo que ha hecho en su carrera, también se debe tener con él una larga conferencia con respecto al futuro. Un ejecutivo que no tiene idea acerca de lo que será el futuro, no es aceptable en la nueva corporación. (Considerado así, los I. Q. que usan en la actualidad, están obsoletos).Hay empresas que ya se están poniendo sensibles al cambio que se opera, generalmente las del área de servicios. Poco a poco el conocimiento se introduce en su conformación. Se están dando cuenta de que la creación de la nueva riqueza, no tiene fronteras: el capital y los conocimientos apalancados por la computadora constituyen la capacidad de respuesta del empresario para enfrentar la nueva realidad.